En la era digital actual, una nueva tendencia ha emergido en las redes sociales: jóvenes emprendedores que prometen transformar vidas a través de cursos en línea. Estos «vendedores de cursos» aseguran tener la fórmula mágica para alcanzar la riqueza y el éxito financiero rápidamente. A través de anuncios llamativos y testimonios inspiradores, captan la atención de una audiencia deseosa de cambiar su destino económico.
La semana pasada, buscando en Tik Tok cómo vender en Hotmart productos, seguí una cuenta determinada. Al día siguiente, esta cuenta me envía un mensaje ofreciéndome ganar dinero si invierto $200 para hacer trading en criptos. Para mi, fue una sorpresa, pues en sus videos de Tik Tok muestra capturas de pantalla donde obtiene diez veces más de ese monto. Luego otras personas me comentan como hay un boom con estos anuncios de estos vendedores.
Esta moda, por supuesto también levanta muchas preguntas sobre la autenticidad de las promesas y de la verdadera eficacia de sus métodos que promocionan. Vamos a examinar este fenómeno, explorando las tácticas utilizadas por estos jóvenes influencers y las implicaciones para sus seguidores.
Tendencia de los jóvenes emprendedores como vendedores de cursos
Toda persona en algún momento del desarrollo de su adultez ha podido sentir que los que están en lo alto del éxito tienen algo que él o ella no ha tenido la ocasión de tener. Es inherente del ser humano el compararse con otros. Entonces, la publicidad de estos cursos ha sido aceptada con total normalidad por parte de un gran número de personas. Además, es común encontrar mensajes que incitan o manipulan de cierta manera la toma de decisiones a través de las emociones de forma subliminal.
Como consecuencia, esta tendencia a la búsqueda de la riqueza a través del desarrollo de técnicas de venta o de la captación de clientes ha hecho que los diferentes mercados estén colapsados de información sobre cómo vender más, cómo lograr un cambio en la vida de tu público, cómo generar más riqueza, etc. Aunando el desconocimiento de una gran parte de la población, se han generado creencias que allanan el camino a la manipulación de algunas personas, que emplean dichas estrategias de marketing en beneficio propio.
En este momento es notoria la tendencia de los jóvenes emprendedores a lanzar cursos online orientados al desarrollo del ser y a la generación de riqueza, que basan su promoción en las redes sociales. La idea es vender la idea de cómo lograr el éxito personal, a través del desarrollo de habilidades y estrategias que permiten esquivar a la pobreza y lograr el ámbito económico deseado.
El propósito deseable de estos cursos es doble. Da la sensación de que hay una búsqueda de crecimiento personal del emprendedor con el desarrollo del curso para ser mejor en el ámbito económico o espiritual. Al mismo tiempo, se pretende vender la idea de: «Yo he seguido estas estrategias y he alcanzado el éxito económico, así que si haces este curso y lo pones en práctica, alcanzarás lo que deseas«.
Los contenidos y promesas de los cursos ofrecidos por estos jóvenes expertos
Los cursos ofrecidos por jóvenes emprendedores en las redes sociales suelen compartir ciertas características comunes. En primer lugar, los contenidos tienden a centrarse en temas como el marketing digital, la inversión en criptomonedas, el dropshipping y otras formas de comercio electrónico. Estos cursos prometen enseñanzas prácticas y estrategias que supuestamente han sido probadas y perfeccionadas por los propios instructores, quienes a menudo se presentan como ejemplos vivos del éxito que sus métodos pueden proporcionar.
Una de las promesas más recurrentes es la obtención de grandes ingresos en un periodo de tiempo relativamente corto. Los emprendedores enfatizan la posibilidad de alcanzar la independencia financiera, abandonar empleos convencionales y vivir un estilo de vida lujoso. Esto se refuerza con imágenes de coches de lujo, viajes exóticos y estilos de vida opulentos que los vendedores de cursos exhiben en sus perfiles sociales.
Sin embargo, al analizar más detenidamente los contenidos de estos cursos, surgen varias preocupaciones. En muchos casos, las estrategias propuestas son simplificaciones excesivas de modelos de negocio complejos, y las expectativas de ingresos pueden ser poco realistas. Además, algunos cursos pueden faltar de una base teórica sólida o de una experiencia práctica suficiente para justificar las promesas realizadas.
El marketing agresivo y el uso de testimonios de éxito —que no siempre son verificables— también son tácticas comunes para atraer a los compradores. Esto plantea dudas sobre la transparencia y la ética de estos emprendedores, ya que la presión social y el miedo a perder oportunidades pueden llevar a los individuos a tomar decisiones financieras precipitadas.
Consideraciones éticas y legales en la comercialización de cursos de enriquecimiento personal por parte de jóvenes
Voy a dejarles aquí cinco consideraciones éticas y legales que debe tomarse en cuenta, si deseas tomar algunos de estos cursos, para considerar cuidadosamente al arriesgarse con uno curso de este tipo.
- Veracidad en la Publicidad: Es fundamental que los vendedores de cursos aseguren que las afirmaciones y testimonios utilizados en su publicidad sean verídicos y no exageren los resultados esperados. Prometer ingresos garantizados o éxito financiero sin una base real puede ser considerado engañoso y, por tanto, antiético y potencialmente ilegal.
- Transparencia de Información: Los vendedores deben proporcionar información clara y detallada sobre el contenido del curso, el nivel de dificultad, los requisitos previos y las expectativas realistas de resultados. Los términos y condiciones, incluidas las políticas de reembolso, deben ser fáciles de encontrar y entender.
- Calidad del Contenido: Los cursos deben ofrecer un valor real y estar basados en conocimientos y prácticas legítimas. Los vendedores tienen la responsabilidad ética de garantizar que sus materiales educativos estén bien investigados y actualizados. La falta de contenido sustancial puede llevar a la percepción de fraude.
- Experiencia y Credenciales: Los emprendedores que comercializan estos cursos deben ser transparentes sobre sus propias credenciales y experiencia. Es poco ético presentar una imagen falsa de autoridad o experiencia para ganar la confianza de los compradores. Tenga cuidado con esto. Busque en la red el nombre del joven vendedor y revise sus credenciales.
- Cumplimiento Fiscal: Los ingresos generados por la venta de cursos deben ser declarados adecuadamente a las autoridades fiscales. La evasión de impuestos no solo es ilegal, sino también una violación de la ética empresarial.
En conclusión, los jóvenes emprendedores que venden cursos de enriquecimiento personal deben adherirse a altos estándares éticos y legales para garantizar que sus prácticas comerciales sean justas y beneficien realmente a sus clientes. La responsabilidad social y la transparencia son clave para construir una relación de confianza y credibilidad en el mercado.
